Os dejo un poema. De niña me encantaba leer poesía en castellano. Me encantaba aprendérmelas y luego recitarlas a solas, escribirla o recordarlas en clase (eran puntos positivos extra en la nota final).
Decía así...
Si me fuera tu vida indiferente;
si yo te amara menos y tú más;
si corazón y sangre y alma y mente
latieran con un ritmo y un compás;
Si fuéramos dos alma paralelas
para volar, cantar, soñar y mar;
dos gaviotas errantes y gemelas
hijas del cielo azul y la ancha mar;
mas somos dos quejosos manantiales
que ruedan entre espinos y jarales
sedientos uno del otro y nada más,
oyendo, bajo tálamos de frondas,
tu suspirar mis ondas, yo tus ondas
¡ay! Sin podernos confundir jamás.
que hermoso soneto pleno de retorica y eufonía
ResponderEliminarME ENCANTABA DE NIÑA, TAMBIEN ME LO SE DE MEMORIA.
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